VANGUARDIA
INTERNACIONAL
10/09/97



Cientos de indígenas de Chiapas inician una marcha a la capital para pedir que el Gobierno cumpla sus promesas

Dimite el presidente del PRI mexicano tras el fracaso en las elecciones legislativas

CIUDAD DE MÉXICO. (Ap.) -- El líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI) mexicano, Humberto Roque Villanueva, presentó ayer su dimisión tras el revés electoral sufrido por el partido en las últimas elecciones, que le llevó a la oposición por primera vez en la historia del México moderno.
El PRI confirmó que Humberto Roque Villanueva había dimitido y que el secretario ejecutivo del partido, Juan S. Millán, ocupará de modo provisional el cargo de líder del partido hasta que sea nombrado un sucesor. La marcha de Roque hace prever una revolución interna en el futuro del partido que ha gobernado México desde el año 1929. Roque fue nombrado presidente de una compañía de seguros estatal, Aseguradora Hidalgo.
El anuncio de la dimisión se produjo al mismo tiempo que el poderoso ministro del Interior, Emilio Chuayffet, comparecía por primera vez ante el Congreso dominado por la oposición desde las elecciones del pasado 6 de julio. Esta es la primera de una serie de comparecencias de ministros ante el legislativo, en lo que se interpreta como la voluntad del Congreso de fiscalizar también por primera vez en décadas la acción del Gobierno, cosa que hasta ahora la hegemonía del PRI había impedido.
Se espera que el nuevo Congreso ponga algunas dificultades a la labor del presidente Ernesto Zedillo en la segunda parte de su sextenato en el poder, especialmente en el control de la política económica y en los gastos presupuestarios. El PRI obtuvo el 39 por ciento de los votos en las elecciones legislativas de julio, pero debido a que el sistema electoral prima de una forma importante al partido más votado, llegó a tener hasta el 48 por ciento de los escaños del Congreso. Pero los dos partidos de la oposición --el Partido de Acción Nacional y el Partido Revolucionario Democrático-- llegaron a un acuerdo para unir el 26 por ciento de votos que cada uno de ellos obtuvo, con lo que se la oposición se hizo con la mayoría en el Congreso. Mientras tanto, los zapatistas reaparecen en la escena pública mexicana. Cientos de miembros del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) partieron de San Andrés Larraínzar y San Cristóbal de las Casas, en el estado de Chiapas (sudoeste), en una marcha reivindicativa que se dirigirá hacia la capital, México DF. El EZLN exige al Gobierno que mantenga las promesas hechas a los indígenas y la formación de un partido político propio.

Copyright La Vanguardia 1997