Cámara Baja Aprobó Fin de Designados

Pese al respaldo de toda la Concertación y de RN a nivel de diputados, se prevé que la supresión de los senadores institucionales será difícilmente aprobada por el Senado.

Esta reforma -que fue rechazada por la UDI- también eleva los quórum para modificar las leyes orgánicas constitucionales.

Enmienda incluye, además, opción de que ex Presidentes sean senadores por un período.

VALPARAISO.- Con los votos favorables de los parlamentarios de la Concertación y de Renovación Nacional se aprobó ayer en la Cámara de Diputados la reforma constitucional que suprime la institución de los senadores designados y eleva los quórum legislativos para modificar las leyes orgánicas constitucionales.

Pese al amplio respaldo que concitó en su primer trámite parlamentario, ya que sólo los diputados de la Unión Demócrata Independiente se opusieron, la iniciativa enfrenta un incierto destino en el Senado porque allí no tiene garantizado el apoyo de la mayoría de los senadores de RN, quienes el año pasado rechazaron una reforma de igual naturaleza, pese a una resolución favorable del consejo general del partido.

La reforma constitucional -que también consagra la posibilidad de que los Presidentes de la República puedan incorporarse al Senado por un solo período, una vez que concluyan su mandato- fue aprobada por 92 votos a favor y 15 en contra, en lo que constituyó el primer logro político del nuevo presidente de Renovación Nacional, diputado Alberto Espina, uno de los gestores del acuerdo interno de su bancada que terminó siendo acogido por el Gobierno.

La iniciativa requería para su aprobación de los tres quintos (3/5) de los diputados en ejercicio, lo que equivale a 72 votos favorables. Igual quórum va a requerir en su segundo trámite en el Senado, donde la Concertación tiene 21 parlamentarios y necesita 28 votos para sacar adelante la enmienda. De allí el decisivo rol que juegan los 11 senadores de Renovación Nacional.

El ministro José Joaquín Brunner manifestó la satisfacción de las autoridades por la decisión favorable de la mayoría de la Cámara Baja y dejó en claro la expectativa del oficialismo de que la reforma sea refrendada en los mismos términos por los senadores de Renovación Nacional. Esgrimió que el país no entendería que los parlamentarios de una misma fuerza política den señales contradictorias frente al mismo tema.

La misma esperanza exteriorizó el diputado Espina al instar a los senadores de su colectividad a asumir una actitud patriótica que signifique dar estabilidad al marco institucional del país.

El jefe del bloque de diputados de la UDI, Darío Paya, deploró la aprobación de la reforma y ratificó la honda convicción de su partido respecto de la conveniencia de mantener los senadores designados, por ser un factor que garantiza la estabilidad institucional y que contribuye a evitar el monopolio político partidista dentro del Congreso.

El parlamentario opositor recalcó, además, que la aprobación de la enmienda deja como secuela la división del frente opositor y le asegura a la Concertación una mayoría incontrarrestable del Parlamento a partir del año 2000, lo que le permitiría cambiar a su antojo leyes fundamentales en el ámbito tributario, laboral y previsional, entre otras.

ORIGENES

El proyecto aprobado ayer por los diputados tuvo su origen en una mensaje del Ejecutivo presentado en la Cámara Baja el 19 de marzo pasado, pero que fue objeto de modificaciones posteriores mediante una indicación promovida por los parlamentarios de Renovación Nacional, la cual concitó el respaldo de los representantes de la Concertación.

La iniciativa original suprimía los senadores designados y consolidaba la institución de los senadores vitalicios extendiendo al ex Presidente de la República Patricio Aylwin la posibilidad de incorporarse a la Cámara Alta en las mismas condiciones que hoy el ordenamiento constitucional le garantiza al ex Presidente y actual Comandante en Jefe del Ejército, general Augusto Pinochet.

Sin embargo, tras una laboriosa negociación al interior de Renovación Nacional que encabezó su nuevo timonel, la bancada de diputados del partido opositor presentó una propuesta alternativa que se enmarcaba en los acuerdos de su consejo general y que añadía elementos adicionales para afianzar la estabilidad institucional.

Dicha indicación fue recogida por el Gobierno y los legisladores de la Concertación y terminó siendo aprobada ayer por la amplia mayoría del plenario de los diputados.

El proyecto en cuestión elimina los senadores institucionales, eleva de 4/7 a 3/5 el quórum necesario para reformar las leyes orgánicas constitucionales, aumenta de mayoría absoluta a 3/5 el quórum requerido para destituir a los ministros de la Corte Suprema sometidos a juicio político en el Senado y establece la posibilidad de que los ex Presidentes de la República puedan integrarse al Senado una vez concluido su mandato o bien acogerse a un estatuto jurídico especial que garantice su dignidad de figura de Estado.

LA INSTITUCION

La figura de los senadores designados es una institución establecida en la Constitución de 1980 que significó una innovación con respecto al ordenamiento constitucional precedente, que establecía un Congreso íntegramente elegido por voto popular.

De acuerdo al artículo 45 de la Carta Fundamental el Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales y otros designados. De estos últimos dos corresponden a ex ministros de la Corte Suprema, cuatro a ex comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas y ex general director de Carabineros, un ex Contralor General de la República, un ex ministro de Estado y un ex rector de una universidad estatal.

Los ex magistrados y el ex contralor son nombrados por el máximo tribunal del país, los ex jefes castrenses por el Consejo de Seguridad Nacional y el ex ministro y el ex rector por el Presidente de la República.

Además, pueden ser senadores vitalicios los ex Presidentes de la República que hayan desempeñado el cargo durante seis años en forma continua, requisito que hoy cumple sólo el general Augusto Pinochet.

La reforma constitucional aprobada ayer en la Cámara de Diputados modifica básicamente el Capítulo V de la Constitución Política relativo al Congreso Nacional y apunta a reducir la composición y número de miembros del Senado. Si la iniciativa llega a prosperar y se eliminan los nueve senadores designados, la Cámara Alta quedaría reducida a 38 miembros elegidos y abierta la posibilidad de que se integren posteriormente los ex Presidentes Pinochet y Aylwin.

SATISFACCION OFICIAL

Tras la aprobación de la iniciativa el Ministro Secretario General de Gobierno, José Joaquín Brunner, afirmó que no le extraña la oposición de la UDI porque, a su juicio, ese partido "no tiene principios concordantes con la teoría democrática moderna".

El portavoz gubernamental sostuvo que no existe posibilidad de asegurar cual va a ser la votación en el Senado, pero aseguró que les parecería extraño que un proyecto que ha sido impulsado con fuerza por los diputados de RN pueda no contar con los votos en la Cámara Alta de sus propios senadores.

"Entendemos que RN es un partido serio y respetable, el partido líder de la oposición y por lo tanto el país no entendería que sus diputados voten unánimemente a favor de una reforma y luego esta sea rechazada en el Senado", aseveró.

Advirtió que si la iniciativa resulta finalmente rechazada en el Senado quien tendría que dar una explicación no sería el Gobierno, sino los diputados y senadores de Renovación Nacional.

Brunner resaltó que se hizo un esfuerzo de consenso muy amplio con RN en la Cámara de Diputados y por lo tanto no ve que exista ninguna necesidad de introducir cambios ulteriores al proyecto en el Senado.

El presidente del partido opositor, Alberto Espina, también exteriorizó su satisfacción, sosteniendo que quedó demostrado que los diputados de su colectividad cumplieron con el país al aprobar una reforma constitucional que da estabilidad a la Constitución y afianza sus principales instituciones.

De los 32 diputados que conforman la bancada de RN un total de 27 votó en favor de la reforma. Los diputados Luis Valentín Ferrada -que manifestó su desacuerdo con la enmienda-, Teodoro Ribera y Rosauro Martínez no asistieron a la sesión, mientras que Maximiano Errázuriz y Carlos Valcarce decidieron no votar.

Espina declaró que el masivo respaldo de los diputados de su colectividad a la reforma testimonia que Renovación Nacional "está cumpliendo el rol de ser el principal partido de la oposición que contra viento y marea está jugado por una mayor estabilidad en Chile".

Respecto del trámite que queda, expresó su esperanza de que este tema sea analizado reflexivamente en el Senado y mirando el interés del país. "Espero de los senadores de mi partido una actitud patriótica que siga la línea que ha tenido RN desde su fundación, que es darle estabilidad a Chile", enfatizó.

Espina restó dramatismo a la división opositora en esta materia señalando que en 1989 también en un principio la UDI se opuso a las gestiones orientadas a reformar la Carta Fundamental que emprendió RN, pero posteriormente se sumó a ella "porque se convenció con buenos argumentos que era buena para el país".

DEBATE

Pese a que se vaticinaba un largo debate sobre el proyecto, cuando habían hecho uso de la palabra una decena de parlamentarios de diversos partidos se solicitó la clausura del debate y la inmediata votación. Desde las tribunas muchos especularon que tal apuro se debía al interés de los diputados por terminar temprano para poder ir a ver con tranquilidad el encuentro de fútbol de las selecciones de Chile y Venezuela.

Por 33 votos a favor y 14 en contra se acordó terminar las intervenciones y pronunciarse en general y particular frente a la iniciativa.

El debate lo abrió el diputado Andrés Allamand, ex presidente de Renovación Nacional y uno de los gestores de la reforma, quien planteó que la institución de los senadores designados fue concebida en un contexto histórico enteramente distinto al actual y por lo tanto las aprensiones que el constituyente de 1980 tenía frente al voto popular hoy no se justifican porque el ideal democrático reina indiscutiblemente en todo el mundo.

También subrayó que originalmente esta institución tenía el propósito de que el Presidente de la República influyera decisivamente en el Congreso, lo que quedó testimoniado en el informe que en su oportunidad entregó el Consejo de Estado, donde se proponía que el Mandatario nominara en su totalidad a los senadores designados.

Allamand sostuvo que en la discusión sobre este tema está en juego si se desea comprometer de lleno a las Fuerzas Armadas y la Corte Suprema en el debate político, añadiendo que en ningún caso los designados contribuyen a despolitizar el Senado ni mucho menos son neutrales en sus votaciones.

Concluyó señalando que al impulsar esta reforma, RN es fiel a la tradición histórica de la derecha de apego a la democracia y cumple con reiterados acuerdos de su consejo general.

Y el presidente del PS, diputado Camilo Escalona, señaló que la concurrencia de los parlamentarios de la Concertación y de RN a aprobar esta reforma resulta positiva porque retoma acuerdos que se gestaron en 1989 para avanzar en la democratización del país.

Escalona fustigó a la UDI señalando que con esta votación se acentúa su aislamiento político.

Los diputados de la UDI Darío Paya y Carlos Bombal, en cambio, criticaron a los legisladores de RN por facilitar una reforma que le garantizará una mayoría parlamentaria incontrarrestable a la Concertación a partir del año 2000.