La oposición acusa al PRI de urdir una guerra sucia en víspera de las elecciones de México
ANTONIO O. ÁVILA
, México
El pasado 12 de abril, Zedillo declaró en un acto público que el PRI y su proyecto buscan «el cambio para la estabilidad, no para el arrebato, para la convivencia pura y armónica, no para la intolerancia ni para la agresión vengativa». Las palabras del presidente mexicano provocaron la censura de diferentes sectores, especialmente del PRD y PAN, pero Zedillo respondió en una transmisión especial por televisión, en la que aseguró que las críticas en su contra eran improcedentes y reiteró que los priístas «conducimos el cambio y no debemos detenernos».
El presidente del PAN advirtió a Zedillo que «si opta por ser un militante del PRI en plena campaña electoral impulsando a sus candidatos, debe atenerse a las reglas de la misma, a señalar, a cuestionar, a ser señalado y ser cuestionado». Incluso, Calderón sostuvo que «el dirigente del PRI no es Humberto Roque Villanueva, es Ernesto Zedillo, y bajo ese entendido, el dirigente del PRI está cordialmente invitado a debatir».
La fracción panista en el Senado indicó que es cierto que Zedillo no violó ninguna disposición legal al acudir al acto priísta ni al hacer uso de sus derechos ciudadanos de militar en el partido que prefiera, pero consideraron que, en México, el hecho de que el presidente se involucre en el proselitismo partidario es un asunto «ético».
Pero el que resaltó el asunto fue López Obrador, quien en su carta a Zedillo manifestó: « Las tareas de publicidad priísta nada tienen que ver con las de jefe de Estado; sus recientes declaraciones en torno a su partido, el PRI, inciden negativamente en una situación ya de por sí tensa».
Una de las reglas no escritas del sistema mexicano priísta, recordó el líder del PRD, es que «cuando un presidente habla de sus opositores con el lenguaje que usted ha utilizado en su mensaje, los funcionarios federales, alcalde, etcétera, toman nota y proceden. Es el momento de atacar sin piedad a los enemigos; en este caso, muchos han leído en su discurso la señal de no detenerse ante nada para frenar como se pueda el avance opositor hacia la alternancia en el poder».
Enfrentamientos
Y pronto se vio el rostro del México bronco. El sábado ocurrió un enfrentamiento en Chiapas, concretamente en la población de Edén, cuando simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y del PRI se enfrentaron con un saldo de 10 heridos.
El trasfondo del problema es la creación de nuevos municipios. Los zapatistas los quieren en un lugar donde su presencia es significativa, y los priístas, en donde las condiciones les favorecen.
En Oaxaca, la policía desalojó violentamente a cientos de simpatizantes del PRD que bloquearon una carretera para exigir la liberación de uno de sus compañeros detenidos bajo la acusación de fraude. Los choques entre fuerzas del orden y manifestantes se saldaron con cuatro heridos de bala y otros diez por contusiones como consecuencia de la intervención de la fuerza pública.
Por si eso fuera poco, Roque Villanueva reaccionó y aseguró que «el retorno del México bronco debe ser rechazado». Afirmó que pronto el PRD mostrará su «verdadero rostro de dureza y de violencia, que lo caracteriza».
Según el razonamiento empleado por el PRD, en la batalla por la democracia en México, su partido es el que ha puesto los muertos. En total, más de 400 en menos de nueve años.
A. O. Á.
, México
Recientemente, el diputado del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) Óscar Levín Coppel dijo: «El Partido de la Revolución Democrática (PRD, centroizquierda) es un partido primo hermano del PRI, que surge de las desviaciones del PRI. Cuando el PRI se empieza a derechizar, hay un grupo de reforma interna que aguanta la revuelta interna, sale y conforma un nuevo partido». En las filas perredistas se tomó la declaración como un nuevo intento por desprestigiar a su organización, pero la realidad descubre que una parte importante del PRD, por ejemplo los tres presidentes que ha tenido en su historia, nacieron y se formaron políticamente en el partido oficial.
Las palabras del priísta fueron aprovechadas para hacer juegos de letras por el presidente del conservador Partido de Acción Nacional (PAN), Felipe Calderón, quien no dudó en decir que celebraba la sinceridad de Levín Coppel, ya que éste había reconocido públicamente «un hecho evidente, que el PRI y el PRD son familiarmente lo mismo, que son primos hermanos». Calderón lanzó una fuerte andanada, al sostener que ambas agrupaciones políticas comparten cultura política, origen y son parte del viejo sistema político mexicano.
El hecho es que, para Calderón, la diferencia entre PRI y PRD es «una letra, la I y la D». En un escenario de encarnizada disputa política, el dirigente panista prácticamente no hace diferencia al hablar de priístas y perredistas en sus discursos.
Cárdenas respondió que si el PAN ve al PRD y al PRI como primos hermanos, en su partido se ve a panistas y priístas como marido y mujer.
En realidad, los conservadores mexicanos no han podido quitarse de encima el coste político de haber apoyado ciertas reformas del ex presidente Carlos Salinas de Gortari. Sus adversarios tampoco olvidan las declaraciones de sus anteriores dirigentes cuando se vanagloriaban al decir que Salinas gobernaba con el programa del PAN. En la actualidad, Salinas de Gortari vive fuera de México y se le relaciona con el encubrimiento de un asesinato presuntamente cometido por su hermano.
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El horizonte de las elecciones legislativas de julio comienza a nublarse peligrosamente, pues la faz del México bronco asoma en medio de una escaramuza verbal entre dirigentes del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) y la oposición de derecha a izquierda. La disputa política envuelve al presidente Ernesto Zedillo y a los dirigentes del centroizquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), Andrés Manuel López Obrador, y del conservador Partido de Acción Nacional (PAN), Felipe Calderón, en la complicada ruta hacia los comicios.
La voz de alerta corrió a cargo de López Obrador, quien aseguró: «Ya tenemos indicios de que se desata contra la oposición una guerra sucia y sin cuartel». En una carta dirigida a Zedillo, el dirigente del PRD indicó: «Usted es el responsable de la estabilidad del país y de su paz social. Me preocupa profundamente que en estos momentos usted desate las fuerzas de lo que se ha dado en llamar el México bronco. Usted es el principal responsable del proceso electoral y de los comicios del 6 de julio».
Las batallas políticas en México en el marco de las campañas hacia las estratégicas elecciones de julio próximo han alcanzado niveles desconocidos, con acusaciones que buscan descalificar al adversario, y ahora la cuestión es que los ataques cruzados han convertido la lucha por la democracia y los escaños en el Congreso en un asunto de familia, en el que los partidos se acusan de ser primos hermanos o de ser marido y mujer.