El ex dictador Bánzer tiene casi asegurada la presidencia de Bolivia

JUAN JESÚS AZNÁREZ ENVIADO ESPECIAL, La Paz
Casi seguro, el conservador Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) perderá el Gobierno de Bolivia porque únicamente alianzas contra natura o la compra de escaños en el Congreso pueden arrebatar la presidencia de la república al general Hugo Bánzer, ganador de las elecciones del domingo. «Una vez le hagan presidente, al viejo igual le da por morirse de infarto», comentaba uno de los leales del que fuera dictador de 1971 a 1978.
 

Hugo Bánzer con su hija Erika,  tras ganar las elecciones (Ap).

Si el definitivo escrutinio oficial de los votos confirma que el candidato del MNR, Juan Carlos Durán, retiene el segundo puesto en detrimento del socialdemócrata Jaime Paz Zamora, del Movimiento de la Izquierda Revolucionaria (MIR), el general dispone de gran capacidad de maniobra para consolidar en el Parlamento una victoria lograda con el 22,3% de los votos. El 6 de agosto será investido presidente el primero o el segundo clasificado en la consulta del domingo que consiga la mayoría de los escaños del Congreso. Durán sumó el 17,7%, y Jaime Paz, el 16,7%. El dirigente del MIR anticipó que, de quedar en tercer lugar, votará por Bánzer en el Congreso.
 
 

A punto de conseguir la jefatura del Gobierno en los tres últimos comicios, en esta ocasión «ya es irrenunciable», aseguró el militar retirado, fundador de la conservadora Acción Democrática Nacionalista (ADN), que denunció los términos de las privatizaciones de empresas públicas ejecutadas por el Gobierno del MNR por considerarlas muy condescendientes con los capitales foráneos. La guerra sucia contra el ex dictador promovida por el Ejecutivo saliente, cuyo candidato cae hasta la mitad de los votos obtenidos por el presidente Gonzalo Sánchez de Lozada cuatro años atrás, dificulta una alianza ADN-MNR. El general, que por segunda vez desde 1979 gana unas elecciones pero no la presidencia debido a las complejas alianzas poselectorales, esta vez va a por todas. Paz Zamora llegó a la jefatura del Gobierno en 1989 gracias al apoyo parlamentario del jefe militar, en retiro. Bánzer, de 71 años, no piensa dejar escapar su última oportunidad para lograr democráticamente el poder y hacerse olvidar como dictador. «He dado suficientes pruebas de mi compromiso con la democracia», manifestó el triunfador de unos comicios que decidieron los 130 escaños de la Cámara de Diputados y los 27 del Senado.
 
 

La Paz, para una indígena
 
 

Por detrás de Bánzer, Durán y Paz Zamora, se clasificaron el empresario Ivo Kuljis, de Unión Cívica Solidaridad (UCS), 15,9%, y la indígena populista Remedios Loza, de Conciencia de Patria (Condepa), que arrasó en La Paz y agrupó el 15,8%. Ninguno de los otros aspirantes a la presidencia, hasta un total de diez, llegó al 4%. La entrada de independientes en las listas de aspirantes a diputados y senadores benefició al general, que consigue 13 escaños en el Senado, Cámara que en última instancia decide la presidencia; el MIR obtiene seis, y sólo tres el MNR, pese a superar en número de votos al MIR en la pugna por la presidencia. La emergente UCS logra 2 senadores, y Condepa, 3, elevando sustancialmente sus votos. Los antecedentes históricos de la joven democracia boliviana demuestran que no se garantiza la gobernabilidad sin el respaldo del Senado. A la espera de la publicación oficial de los resultados definitivos, ADN obtiene en la Cámara baja unos 33 diputados; el MNR, 26; el MIR, 25; UCS, 21, y Condepa, 17.
 
 

La mayoría de los análisis coinciden en señalar que sólo imponderables graves o virajes políticos imprevistos pueden evitar que Bánzer sea presidente. Ha obtenido la primera mayoría en los cómputos totales, y además tiene como aliados potenciales al MIR, a Condepa y a UCS. Es muy difícil que el oficialista Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) pueda conservar la jefatura del Gobierno: aunque lograra el respaldo de Condepa y de UCS, es prácticamente imposible una coalición con el MIR, y, por tanto, llega a la mayoría parlamentaria obligada. Hugo Bánzer Suárez, que valora positivamente su convivencia con Paz Zamora en 1989, puede elegir: ADN-Condepa-MIR o ADN-MIR-UCS.

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