Informes del CESID prueban el secuestro de tres indigentes para usarlos
como cobayas
La acción fue ejecutada por agentes del Centro y recibió la
clave secreta «Aneto-Esfera-Shuto»
MANUEL CERDAN
ANTONIO RUBIO
MADRID
- El CESID secuestró en julio de 1988 a un mendigo y dos drogadictos
para experimentar con ellos un anestésico que pensaban utilizar en
el secuestro del dirigente etarra Juan Antonio Urruticoechea «Josu
Ternera»...
- EL MUNDO ha tenido acceso al contenido de una serie de documentos
del CESID en los que se aportan detalles esta operación, que recibió
el nombre en clave de «Aneto-Esfera-Shuto».
El plan, que pertenecía a un operativo de mayor rango llamado en
clave «Urbión-Bombilla-Mudo», se desarrolló, principalmente,
en Madrid, al mismo tiempo que agentes del Centro vigilaban de cerca al
miembro de ETA en Bayona (Francia).
- En la primera clave, «Aneto» corresponde al departamento
del CESID que encarga la operación, en este caso la unidad contraterrorista.
«Esfera» se refiere al ámbito de la operación, el
de ETA. Y «Shuto», a la misión concreta: probar el anestésico.
En la segunda, «Bombilla» tiene relación con la banda terrorista
y «Mudo» se refiere al secuestro del etarra.
- El operativo también fue conocido a nivel interno con el nombre
«Menguele», en alusión al apellido Manglano y al médico
nazi que experimentó con judíos como si fuesen cobayas. El
documento base de la operación aparece firmado por el coronel «Losada».
- A pesar de que «Josu Ternera» fue detenido por la Policía
gala en enero de 1989, la operación del CESID continuó «activa»
hasta 1990, según se puede constatar en documentos internos de los
servicios de información.
- INFORMADO
La informacionde secuestro de los tres indigentes y de «Josu Ternera»
partió de la dirección del Centro. La operación fue
coordinada por los coroneles «Losada», responsable de la Jefatura
de Apoyo Operativo, y «Don Emilio», miembro del Gabinete de Manglano,
según los agentes del CESID consultados por este periódico.
Manglano fue informado puntualmente de todo.
- El plan «Aneto-Esfera-Shuto» se desarrolló en cinco
días y contó con la participación de 53 agentes de
la unidad de elite del CESID, conocida como «Ala-25». La misión
pertenecía a otra más genérica llamada «Urbión-Bombilla-Mudo»,
cuyo fin era el secuestro de «Josu Ternera».
- La misión «Shuto» resultó un fracaso. Los
tres secuestrados en Madrid, a los que los agentes del CESID inyectaron
el anestésico, tuvieron diferente suerte. Uno de ellos, mendigo,
murió, según han asegurado a EL MUNDO agentes del CESID, sin
que este extremo haya podido ser verificado.
- Los otros dos, que eran hermanos y drogadictos, fueron secuestrados
en el barrio de Malasaña y golpeados al oponer resistencia. Uno sufrió
rotura de tabique nasal, por lo que tuvo que ser abandonado en las proximidades
de un centro sanitario de Madrid. El otro fue abandonado en una calle del
barrio de Tetuán.
- El médico que proporcionó el anestésico y después
analizó sus efectos es jefe de cardiología en un hospital
de Madrid y gran amigo de Manglano. Según fuentes próximas
a este doctor, el suceso lo marcó de por vida.
- El efecto de la droga, según las necesidades de la dirección
del CESID, debía durar al menos una hora y mantener al anestesiado
con sus constantes vitales. La intención última de la operación
consistía en secuestrar a un dirigente etarra en el sur de Francia,
introducirlo en un cajón de madera y después cruzar la frontera
en un camión. A su llegada a España, el etarra sería
entregado a la Guardia Civil para que lo sometiera a un interrogatorio y,
una vez conseguida toda la información, ya decidirían qué
hacer con él.
- DE LA TRAMA
«Aneto-Esfera-Shuto» arrancó en julio de 1988, según
reflejan los documentos del CESID. El primer paso consistió en la
localización, en el sur de Francia, del domicilio de «Josu Ternera»,
que era uno de los principales dirigentes de ETA en aquella época.
El nombre en clave que recibió esta fase de la operación fue
«Aneto-Esfera-Regalo», como quedó plasmado en un informe
del CESID.
- A continuación, y una vez localizado el domicilio de «Josu
Ternera» en Bayona, los agentes del CESID pusieron en marcha la siguiente
fase: «Aneto-Esfera-Flotador», que consistió en sustraer
en Madrid tres vehículos para llevar a cabo los secuestros. La clave
«Flotador» se refiere al automóvil.
- El robo de los vehículos, a su vez, tuvo otras dos fases. Primero,
los agentes del CESID se trasladaron a un taller mecánico de Madrid.
Allí, tras entretener al encargado del local, consiguieron con un
molde especial de plastilina el duplicado de la llave de tres vehículos
que en aquellos momentos estaban reparando.
- Después, cuando los propietarios de los vehículos los
retiraron del taller, fueron seguidos hasta sus respectivos domicilios.
Y por último, los agentes del CESID se llevaron los automóviles,
dos Renault-21 y un Ford Sierra.
- Para no ser detectados, los espías cambiaron las matrículas
de los tres automóviles, por lo que se vieron obligados a sustituir
los cristales, que tenían grabados los números de las matrículas
originales, en un taller de la cadena Arevalillo. Al final de la operación
los tres vehículos, convertidos en chatarra, fueron abandonados en
unas dependencias del CESID, en Manzanares (Ciudad Real).
- El operativo de los secuestros en Madrid, que siempre se mantuvo dentro
del CESID entre las mayores de las reservas, fue ejecutado por agentes del
«Ala-25». Este grupo estaba considerado como la elite de la Agrupación
Operativa de Misiones Especiales (AOME) del CESID, entonces dirigida por
el coronel Juan Alberto Perote. El jefe operativo de la AOME era el coronel
«Ureña».
- EN FRANCIA
(«Aneto-Esfera-Regalo» y «Aneto-Esfera-Flotador»),
los hombres del «Ala-25» iniciaron la fase «Aneto-Esfera-Biberón»,
consistente en la creación de seis «buzones en Faisán»
(nombre en clave de «Francia»).
- Los «buzones» son piezas fundamentales en el sistema de
comunicación de los hombres del CESID, ya que allí es donde
depositan o recogen los mensajes de sus colaboradores o infiltrados en las
organizaciones terroristas. Generalmente los buzones son colocados en espacios
abiertos, ya que disponen de un código de pintadas y señales
para avisar si están llenos o vacíos. Las pintadas también
sirven para alertar si se corre peligro o han sido seguidos.
- La quinta fase de la operación fue dirigida, una vez localizado
el paradero de «Josu Ternera», a confeccionar en «Faisán»
(Francia) tres «zulos» donde los agentes del «Ala-25»
podían depositar armas para el momento en que las necesitaran. El
nombre en clave que recibió esta nueva etapa fue la de «Aneto-Esfera-Arca».
- Agentes del CESID, que reconocieron haber trasladado armas al sur
de Francia, contaron a EL MUNDO los métodos empleados: «Unas
veces las pasábamos nosotros mismos, utilizando un paso fronterizo
no vigilado o a un gendarme amigo. Otras veces, nos servíamos de
las valijas diplomáticas. Si no funcionaba ninguno de estos sistemas,
las adquiríamos en Francia, a través de las redes de venta
de armas que ya conocíamos».
- Alonso Manglano y sus hombres sufrieron una gran decepción
en enero de 1989. Cuando ya tenían a «Josu Ternera» a punto
de aplicarle el anestésico, la Policía francesa, que también
hacía tiempo que iba detrás de la pista del dirigente etarra,
se les adelantó.
- NUEVOS OBJETIVOS
- Los hombres del CESID, que tenían una base operativa en el
hotel Loustau de Bayona, junto al río Adour, vieron en directo cómo
era detenido el dirigente etarra y se esfumaba su trabajo. Pero, a pesar
de la detención de «Josu Ternera», el CESID dio la orden
de continuar con la operación y enfocarla hacia otros dirigentes
de la cúpula etarra.
- Estos mismos agentes han asegurado a este periódico que los
mejores resultados del operativo general se consiguieron en enero de 1990,
curiosamente cuando «Josu Ternera» ya estaba recluido en una cárcel
de París.
- Una de las últimas fases detectadas por EL MUNDO con respecto
a la operación general «Aneto-Esfera-Shuto» es la que se
conoció con el nombre en clave «Aneto-Esfera-Abadía».
El mismo día que detuvieron a «Josu Ternera», en enero
de 1989, un grupo de militantes de la organización terrorista fue
detenido por los policías galos en los alrededores de la Abadía
de Belloc.
- La ejecución de la operación «Esfera-Aneto-Shuto»
provocó que parte de los agentes que intervinieron en el dispositivo
presentara grandes problemas de conciencia por la muerte del mendigo, y
porque los propietarios de los vehículos no recibieron ninguna compensación
económica, como era habitual en el CESID.
- La costumbre, dentro del Centro, era que cuando un ciudadano era perjudicado,
se le recompensaba de forma anónima. Conseguían un premio
de un banco, eran agraciados en algún sorteo con un vehículo
o un viaje.
- Al final, varios de los 53 agentes que intervinieron en la operación
pidieron cambio de destino. Otros dejaron «La Casa», como popularmente
se conoce al CESID. La operación «Shuto» dejó marcados
a los «007» del CESID.
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