Perú, Domingo 22 de Diciembre de 1996 |
La última carta del MRTA
Por PAOLA JERI. El ex dirigente del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, Sístero García Torres (a) "comandante Ricardo", dijo que el MRTA "se juega su última carta" con el asalto de la residencia del embajador de Japón. En conversación telefónica con La República, García Torres -quien se acogió a la Ley de Arrepentimiento, se reincorporó a la sociedad y ahora vive en El Sauce, departamento de San Martín-, afirmó que sus ex camaradas "resistirán hasta el final porque saben que es la última oportunidad que tienen". "Siempre estuvo dentro de los planes de los revolucionarios liberar a los presos políticos", dijo García Torres. Sístero García Torres fue comandante del Frente Nor Oriental de la Selva, uno de los aparatos de combate más amplios y de mayor trascendencia del MRTA, entre 1987 y 1992, hasta que tuvo una fuerte disputa con Néstor Cerpa Cartolini, quien lo reemplazó. "Creo que el MRTA se está jugando su última carta con esta acción teniendo en cuenta que hasta hace una semana estaba reducido a hacer una 'resistencia histórica', como se dice en la jerga guerrillera al repliegue de tropas", afirmó García Torres. "Tal vez puedan matar. Pero imagino que no están decididos a perder por cualquier motivo", añadió. El hombre que comandó el frente más poderoso y exitoso del MRTA, y que recientemente postuló sin mayor fortuna a la alcaldía de su pueblo por una lista independiente, se dedica a la agricultura y a su pequeña granja. Para "Ricardo", el "comando suicida" que ocupa la residencia del embajador japonés Morihisha Aoki, con más de 300 rehenes, estaría integrado por militantes provenientes de la Selva Central, Junín y Cerro de Pasco, pero dirigido "tal vez por un dirigente histórico", en alusión a Néstor Cerpa Cartolini, Rodolfo Klien Samanez o Hugo Avellaneda Valdez. En las últimas horas, se confirmó que Cerpa era el jefe del comando, y en un video se le vio haciendo los preparativos de la captura de la residencia nipona sobre una maqueta de las instalaciones. "Sé que en esa zona de la Selva Central había una columna entrenándose, por eso creo que algunos deben provenir de allí", indicó: "De lo que no dudo es que todos son peruanos", comentó Sístero García. Apuntó también que el "comando suicida" forma parte del destacamento de "Fuerzas Especiales" del MRTA, grupos de élite que organizaron Peter Cárdenas Schulte y el chileno Juan Castillo Petruzzi. "Este destacamento se caracteriza por tener mayor destreza que el resto de combatientes y aptitudes de tipo comando", explicó Sístero García. "Sus acciones son realizadas en coordinación con la Dirección Nacional del MRTA, que obviamente no está en el lugar de los hechos", precisó. Ficheros del comando Luego de superar su inicial desconfianza, García Torres suministró información respecto a la característica de los principales dirigentes activos del MRTA. "Con la experiencia de haber dirigido el MRTA durante cinco años, de haber combatido al lado de Víctor Polay Campos, no creo que los emerretistas retrocedan y desocupen el local que han tomado", manifestó. "Estoy seguro que irán hasta el final, lo cual no quiere decir que necesariamente habrá derrammamiento de sangre", precisó. "Ese es uno de los principios básicos del partido, respetar los derechos humanos, y los compañeros saben perfectamente que no les conviene que nadie muera, por lo menos bajo su responsabilidad", dijo Sístero García: "En estos momentos se estarán dando cuenta que no es como creían". Para García sus ex compañeros tienen dos alternativas: morir o asilarse en el extranjero, o replegarse a la Selva Central. "Veo difícil que se retiren de la embajada sin haber conseguido la liberación de los presos políticos". La República le preguntó a Sístero García por sus ex compañeros de la Dirección Nacional del MRTA. Respecto a Rodolfo Klien Samanez (a) "camarada Dimas", dijo que "si tiene algo que ver con la toma de la residencia, hay esperanzas de llegar a un acuerdo, porque Klien es un tipo que siempre escuch". Y agregó: "A veces da la razón, o explica los motivos por los cuales no se puede llegar a un acuerdo". Compañeros de ruta Describió a Klein como un tipo inteligente, el más "blando" del movimiento armado. Muy tolerante a diferencia de Hugo Avellaneda, "quíen es definitivamente todo lo contrario, un radical". "A Hugo Avellaneda lo conocí poco, sólo lo ví en las reuniones que había en la capital. Era un tipo muy directo y alterado. Ellos (los que conoció en Lima) iban con consigna", explica García Torres. Ambos mandos se diferencian mucho del prófugo "comandante Evaristo", Néstor Cerpa Cartolini, a quien describe como un hombre "frecuentemente callado". "Lo conocí cuando todavía estaba libre Polay Campos. El también se inició en 1987 hasta enero de 1992, en que me acogí a la Ley de Arrepentimiento" recordó Sístero García de su ex compañero de armas. "Con él peleamos juntos, pero como en ese tiempo Polay ordenaba, teníamos que acatar, y Cerpa en ese tiempo hablaba muy poco", explicó: "Jamás fue risueño ni parrandero, siempre se le veía haciendo apuntes en su agenda". Esto fue antes de la riña que García Torres tuvo Sístero García Torres con el MRTA, incluído el camarada "Evaristo" del que ahora sostiene: "Ahora que está al frente, no se la ha visto con mucho futuro. Sólo recordemos qué era el MRTA hasta hace una semana". García Torres aseguró que el MRTA ejecuta la acción contra la legación japonesa como último recurso para luego poder resurgir de haciendo política en la legalidad. "Si quieren conseguir la legalidad como partido, que lo hagan pero sin sin sangre. De lo contrario, nadie los respaldará", manifestó. Desde El Sauce, el ex miembro de la Dirección Nacional del MRTA, hizo un llamado a los que fueron sus compañeros de organización: "Deben respetar los derechos humanos hasta el final". "Deben entender que lo que el país necesita es un solución ecuánime, y así la opinión pública internacional no diga que aquí en el Perú no hay personas civilizadas que desprecian a la humanidad", manifestó. "Sólo espero que el gobierno y el MRTA lleguen a una solución sensata", dijo.
Reiteró asimismo que aceptó hablar con La República,
para dejar sentado que abandonó la lucha armada para dedicarse
a la pacificación del país. |