Revista Electrónica Bilingüe Nº 11 Enero 1997
En el segundo trimestre de 1996 el Gobierno Nacional comenzó a implementar la Agenda Venezuela, Programa de Estabilización Macroeconómica orientado básicamente a reducir la inflación, corrigiendo los profundos desequilibrios que afectaban la economía del país, restableciendo la confianza de los agentes productivos y creando las bases para un sostenido crecimiento económico que contribuya a la continua y progresiva reducción de la pobreza.
A ocho meses de la aplicación de la Agenda Venezuela, los resultados han sido francamente positivos.
El mantenimiento de elevados niveles promedio de los precios petroleros superiores a 17$/Barril y una considerable entrada de inversiones extranjeras, han dado como resultado una balanza de pagos muy activa que se refleja en una cuenta corriente superavitaria de alrededor de 5.500 millones de dólares. Este proceso ha permitido una rápida recuperación de las reservas internacionales que se ubican a principios de diciembre en 16.200 millones de dólares. Este comportamiento ha contribuido a la estabilidad del tipo de cambio que en los últimos 8 meses a fluctuado entre 470 y 475 bolívares por dólar.
Como consecuencia de la liberación de precios de las mayores ramas de los servicios públicos y de los precios internos de los combustibles, la tasa de inflación alcanzará a algo más de 98% promedio anual, pero con un comportamiento mensual de permanente reducción ya que de 12,4% en el mes de mayo, se redujo a 3,1% en el mes de noviembre.
El déficit fiscal se ha superado ampliamente ya que al cierre de 1996 la gestión financiera del gobierno Central arrojará un superávit de 1,5% del P.I.B.
Asimismo, según lo reconoció la Misión del F.M.I., la crisis del sector financiero ya ha sido superada, aunque destacó la necesidad de adelantar el programa de fortalecimiento de los organismos supervisores.
Perspectivas para el año 1997
Durante 1997 con la aplicación de la segunda fase de la Agenda Venezuela, los resultados que se esperan serán aún más positivos.
Producto Interno Bruto.
Se espera una franca recuperación del P.I.B. que superaría
el 4,5%. En este resultado será fundamental el comportamiento
de las actividades productivas no petroleras que crecerán
a una tasa del 4%.
Balanza de Pagos y Reservas Internacionales:
Las exportaciones totales superarán los 21.000 millones
de dólares, mientras que las importaciones alcanzarán
a 12.000 millones de dólares, lo cual dará como
resultado que la balanza comercial sea superavitaria en 9.000
millones de dólares.
Se estima un superávit de 3.500 millones de dólares en la balanza de pagos en cuenta corriente, que junto al saldo positivo de la cuenta de capital permitirá elevar las reservas internacionales a alrededor de 20.000 millones de dólares para finales de año.
Finanzas Públicas
Se estima que la gestión financiera de Gobierno Central
cierra el año con un superávit de 2,5% del P.I.B.
Inflación
La progresiva reducción de las expectativas inflacionarias,
la estabilidad del tipo de cambio y la eliminación del
déficit fiscal, permiten anticipar una fuerte desaceleración
de la inflación que alcanzaría una tasa anual que
se ubicará entre el 20 y 25%.
Política Laboral y Reestructuración del Estado:
Para garantizar la permanencia de los equilibrios macroeconómicos
y el crecimiento sostenido de la producción, se producirán
importantes cambios estructurales e institucionales en el mediano
plazo. En lo concerniente a la política laboral, se instrumentarán
medidas dirigidas a la flexibilización del mercado de trabajo.
El aumento de los salarios estará en función de
la instrumentación de programas que permitan el incremento
de la productividad y la eficiencia, así como la organización
y puesta en marcha de un autentico sistema de seguridad social.
Así mismo, se considera prioritario la reforma del estado y la urgente racionalización de la gerencia pública. En ese sentido se espera lograr una completa modernización de la gestión fiscal, la reducción de la burocracia y completar la descentralización de los servicios de salud y educación.
De otra parte, durante el año 1997 se culminará el proceso de privatización de las empresas que tradicionalmente han estado en manos del Estado y se activarán otros mecanismos que permitan una mayor participación del sector del sector privado en la prestación de servicios a la comunidad, a través del sistema de consecciones y el programa de conversión de deuda pública en inversión.