Práctica 8
Llena los espacios vacíos en el siguiente ejercicio con el artículo definido corres-pondiente

Gap-fill exercise

Fill in all the gaps, then press "Check" to check your answers. Use the "Hint" button to get a free letter if an answer is giving you trouble. You can also click on the "[?]" button to get a clue. Note that you will lose points if you ask for hints or clues!
Según la creencia popular, almas de difuntos obtienen permiso divino una vez al año para visitar a sus seres queridos. A muerte le llaman la escueta, la huesuda o la que siempre enseña diente.
Estamos en el pueblo de San Andrés Mixquic, al sur de capital, al que llegamos día antes del festejo.
día siguiente, doña Consuelo se dispuso a preparar el altar de muertos de su casa y nos pidió que la ayudáramos. Frente a pared había una pequeña tarima de madera de apenas un metro de profundidad a la que se accedía por tres pequeños escalones. Doña Consuelo sacó de una vieja alacena un mantel de encaje que había bordado su madre para desplegarlo sobre superficie central y después cubrió partes secundarias con papel picado.
Más tarde me pidió un salero que había en un estante situado a izquierda. Al colocarlo, comentó: “Es para que el cuerpo no se corrompa en viaje de ida y vuelta y pueda regresar el próximo año”. Luego añadió un vaso de agua cuyo objeto es mitigar sed del muerto, y la primera estampa de una serie interminable: “Para empezar, las de ánimas del purgatorio, que sirven para obtener libertad del alma de mi difunto. Tras colocar sus santitos, se dirigió a alcoba y la vimos regresar sosteniendo casi religiosamente foto de su marido difunto enmarcada que situó en pared, presidiendo altar.
De inmediato, el frenesí del resto de elementos: velas, veladoras o ceras, cuya llama simboliza luz, fe, esperanza, guía desde el más allá.
“¿Faltan muchas cosas?”, le pregunté. “Lo más importante”, respondió ella, ufana, limpiándose manos en el delantal. “Primero, flores; el 31 de octubre no pueden faltar flores, como el alhelí y la nube.
Lo demás fueron dos docenas de elementos: un bizcocho dulce, llamado pan de muertos; unas pocas manzanas, que representan sangre y amabilidad, … un aguamanil, jabón y toalla, por si ánima necesitaba lavarse después del viaje,
Empezó a llegar la familia y nos hicimos a un lado para dejar sitio a los hijos, los hermanos y los nietos vivos que recibían ánimas de la tía, el abuelo y el marido difuntos.
Detuvimos la marcha un momento y se acercó un familiar de doña Consuelo con cura del pueblo. Durante unos minutos le escuchamos atentamente, en especial cuando nos describió que, cerca de Veracruz, indígenas huastecos se disfrazan día de muertos con las más variadas indumentarias, pero sólo los que portan máscara de madera son llamados “viejos”, ya que su función es la de materializar alma de los muertos.